Según cuenta la leyenda, ésa fue la exclamación del Papa Inocencio X al ver el retrato que acababa de pintarle Diego Velázquez. El historiador Jonathan Brown nos cuenta sobre el cuadro: "Inocencio se había ganado la fama de hombre alerta que desconfiaba de los demás y se mostraba tenaz e infatigable en el desempeño de su cargo. Y así es exactamente el hombre que vemos en el retrato de Velázquez. En la mano izquierda tiene un trozo de papel del que el pintor se sirve con la doble finalidad de identificarse como autor del cuadro y dirigir una petición al pontífice [...]. Es fácil imaginar que estamos viendo al Papa en la audiencia que ha concedido al pintor del rey de España. Ya ha leído la petición, y ahora dirige al que la suscribe una mirada expectante pero a la vez de desafío. Y por medio de este procedimiento dramático, el retrato se convierte en el hombre mismo, no en una mera imagen o registro de su apariencia física". Quizás, de ahí, la expresión del sumo pontífice (¡demasiado real!). La penetrante mirada del Papa hace sentirse un tanto incómodo, mostrando -en efecto- algo más que la apariencia física.
Esa capacidad de mostrar el "alma" del -a mi juicio- mejor pintor de la Historia es la que, en ocasiones, le vale mayores críticas, al tenerlo como mero imitador de la realidad (!?) ante otros artistas "creadores". Sin menospreciar a ninguno -pero Velázquez es mucha "tela marinera" como decimos por aquí- os propongo un juego. Realmente ¿qué conocemos del arte actual?. ¿Cómo reaccionar ante una obra que no entendemos?. La mayoría de las veces, la información puede ser nuestra mejor guía, pero en otras ocasiones... hay cosas que no tienen nada que aportar, se miren por donde se miren. Siempre podemos encontrarmos obras sin valor, sean de la época que sean. Aunque... ¿qué hace de una pintura una obra de arte?.
Bueno, el juego es el siguiente: imaginaros que os encontráis en una afamada feria de arte internacional. De repente, una reportera de televisión se os acerca y os pide vuestra opinión sobre una de las obras que cuelgan en la pared...
Esa capacidad de mostrar el "alma" del -a mi juicio- mejor pintor de la Historia es la que, en ocasiones, le vale mayores críticas, al tenerlo como mero imitador de la realidad (!?) ante otros artistas "creadores". Sin menospreciar a ninguno -pero Velázquez es mucha "tela marinera" como decimos por aquí- os propongo un juego. Realmente ¿qué conocemos del arte actual?. ¿Cómo reaccionar ante una obra que no entendemos?. La mayoría de las veces, la información puede ser nuestra mejor guía, pero en otras ocasiones... hay cosas que no tienen nada que aportar, se miren por donde se miren. Siempre podemos encontrarmos obras sin valor, sean de la época que sean. Aunque... ¿qué hace de una pintura una obra de arte?.
Bueno, el juego es el siguiente: imaginaros que os encontráis en una afamada feria de arte internacional. De repente, una reportera de televisión se os acerca y os pide vuestra opinión sobre una de las obras que cuelgan en la pared...
¿Qué hubiérais dicho vosotros?
2 comentarios:
Sí, la "acusación" de reflejar la realidad es buenísima y sí, Velázquez es el mejor pintor que ha habido. Qué gusto poder decirlo por fin.
No sé si verías la entrevista de la expo de F. Bacon en El Prado.
En ella, el pintor reconocía que no había ido a ver el retrato de Inocencio X, aunque había vivido en Roma y podía haber asistido 100 veces, porque pensaba que si lo veía "en persona" ya no iba a tener valor para seguir haciendo versiones, que se quedaría demasiado impresionado y se daría cuenta de que lo suyo no valía la pena.
pd. No he visto el video, pero yo hubiera caído, lo reconozco, como en una cata a ciegas, caería.
Fíjate, y yo que pensaba que Bacon tendría más que visto y revisto el retrato, ¡menos mal que nunca dejamos de aprender!. Muchas gracias por el comentario y, he de reconocerlo, yo también hubiera caído...
Un saludo
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